FELICIDAD ETERNA

Una adolescente observaba a su hermanito, el cual perseguía una mariposa Y este se maravillaba con sus colores y su vuelo, quería atraparla y se le iba, una y otra vez en el campo, entre flores y árboles, rodeado de naturaleza, el sol brillaba, la primavera nacía.

Luego su hermanito vio un conejo y dejó de seguir a la mariposa por ir tras el conejo, que pronto perdió de vista, levantó su mirada y vio a su papá, este le sonreía y lo alzó hasta abrazarlo.

Era un día de campo de convivencia familiar, no había sido necesario un diálogo hablado, el niño vivía la alegría y el Amor familiar, junto con su Papá, con su Mamá y sus dos hermanas.

Caminaron río abajo y brincaban de piedra en piedra, cruzando el riachuelo, el viento los acariciaba mientras jugaban a mojarse los pies.

Al regreso a casa, la hermana adolescente le preguntaba a su mamá 

¿ Para que vivimos ?

(MAMÁ) Para ser felices.

La adolescente relacionó la felicidad con el goce de ese día tan especial, que le traía serenidad, alegría y paz, también cuando se reconciliaba con su hermana, después de haberse peleado con ella; En sus estudios se sintió feliz de haber sacado la mejor calificación; Cuando conoció un muchacho que le gustaba, se llenó de alegría.

De esta manera fue recolectando momentos de alegría y felicidad y en cada uno de esos momentos, sentía que realizaba el fin de su vida, de SER FELIZ.

Por otra parte, cuando vivía una desilusión, frustración y dolor, sentía que no tenía sentido todo eso, porque no cumplía el objetivo de ser feliz.

Necesitaba una respuesta más profunda o convincente, para no perder la felicidad a causa del dolor y el sufrimiento.

¡ Mamá !  Me siento triste.

(MAMÁ)  ¿ Qué te pasa ?

(HIJA)  Una vez me dijiste que vivíamos para ser felices, pero hay muchas cosas que me ponen tristes y no se cómo ser siempre feliz.

Me pone triste cuando mi novio se enoja conmigo, o cuando tú y Papá a veces discuten, o cuando saco malas calificaciones en la escuela, o cuando me duele una muela, también cuando veo gente pobre o enferma, o cuando mi amiga me dijo que a su Papá le robaron su auto.

¿ Cómo sostener esa vivencia de felicidad  ante tantas cosas malas, para darle sentido a la vida ?

Su Mamá la tomó de la mano y la llevó ante un crucifijo y le dijo 

¿ Qué ves ahí ?

(HIJA) A Jesús crucificado.

( MAMÁ) ¿ Cómo crees que ÉL vivió la felicidad ?

(HIJA) Pues yo pienso que no fue feliz, muriendo en esa cruz.

(MAMÁ)  y si te digo que es la persona más plena y más feliz 

¿ Me creerías ?

(HIJA)  No.

(MAMÁ)  ¿ Porqué no ?

(HIJA)  Porque sufre, sufre muchísimo .

(MAMÁ) Cuando yo te iba a dar a luz sufrí con el parto, tanto por los dolores físicos, como por la incertidumbre de que todo saliera bien, sin problemas, pero una vez que naciste me llené de felicidad y el sufrimiento lo dejé atrás, te abracé

¡ mi bebecita !   con mucho Amor y ternura.

¿ En qué momento fui feliz y en qué momento no ?

No puedo decir tajantemente que en el parto no fui feliz y después del parto si, porque desde antes ya me alegraba de llegar a tenerte y después ya gozaba de tenerte en mis brazos.

Durante el parto, mi felicidad se guardaba en la esperanza de que todo saldría bien, por lo tanto, no hay gloria sin pena que superar y la felicidad se da por añadidura, cuando se ha hecho la voluntad de Dios.

No confundamos la alegría, con la felicidad verdadera.

El malvado se alegra al lograr su maldad, pero el resultado final, siempre le traerá amargura y frustración, en cambio, cuando se hace la voluntad de Dios, aunque pase por pena y dolor, el resultado final es la felicidad plena, sin remordimientos de conciencia, sin frustraciones, ni amarguras, un regalo de Dios por hacer su voluntad, que da la paz por el deber cumplido y vivimos la plena autorrealización.

(HIJA)  ¿ Eres feliz , Mamá ?

(MAMÁ) He tenido muchos momentos alegres y felices, pero el camino es muy largo.

La verdadera felicidad eterna, se dará hasta que hayamos pasado a la otra vida y Dios nos juzgue dignos de pasar al cielo, donde LA FELICIDAD quedará sellada para TODA LA ETERNIDAD…

(HIJA) Para eso se necesitaría mucha FE, para vivir en este mundo con el pensamiento de canalizar todas las obras en hacer la voluntad de Dios y renunciar a muchos placeres que traen vanas alegrías pasajeras.

(MAMÁ) Si hija ¡ TEN FE ! 

Por eso estamos llamadas a vivir la santidad.

El premio será grande

¡ muuuy grande !

Ten FE y vive conforme a esa

FE en JESUS, que nada, ni nadie te la quite, porque es la llave de oro que te ayudará a lograr la FELICIDAD ETERNA…

 

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