EL VALOR DE UNA FLOR
Un joven soltero, llevó a una bella soltera, una flor que colocó afuera de su casa a los pies de su puerta.
Ella no lo conocía, primero le causó admiración ver la flor.
El joven se propuso llevarle una cada día, temprano por la mañana y junto con la flor, un pequeño mensaje para cuando ella saliera de su casa, se topará con esa sorpresa.
Después que a la joven le pasara el sentimiento de admiración, tuvo curiosidad de conocerlo y asomándose por la ventana, a veces lo veía.
Temerosa y dándose su importancia, sólo recogía su regalo sin contestar los mensajes.
Pasaron los días y le comenzó a parecer aburrido el detalle que el joven le tenía, lo comenzó a ver normal.
Días más tarde, hasta se molestaba, a tal punto, que tomaba aquel detalle y directo lo tiraba a la basura.
El joven tuvo que salir lejos, a otro pueblo por un tiempo largo, ella de pronto se sorprendió de ya no encontrar nada y al pasar los días se preguntó :
¿ Por qué ya no me trae mi flor y algún recadito ?
¡ Tal vez maté toda esperanza en él !
¡ No me importa ese enfadoso !
Pero al pasar más días, comenzó a extrañar eso que para ella había sido normal y hasta tedioso.
Deseó volver a encontrar afuera de su casa una flor de él, que le alegrara el día.
El joven volvió al pueblo y ella en una tienda lo vio, sin que él la viera; ella deseó con más ganas tener una amistad con él.
Un día él se acordó de ella y decidió seguir haciendo lo mismo.
Al amanecer salió de su casa y ella se encontró con la flor deseada.
Saltó de gusto y para ella fue un día lleno de felicidad.
Ella comenzó a corresponder sus recados, e inició una bella amistad entre los dos.
Después de un tiempo se casaron y formaron un hogar.
Hasta el día de hoy, ella sigue recibiendo día a día este detalle, a pesar de diversas circunstancias y cada mañana lo toma con amor.
Hoy a pesar de ser el mismo detalle, ella no siente lo mismo, no es lo mismo de antes.
HOY VE LA FLOR CON OTRA MIRADA, porque HA CAMBIADO SU VALOR, hoy es diferente porque HA CRECIDO SU AMOR…
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