EL HIJO PREDILECTO

La lluvia torrencial, formaba ríos y lagos y mucha agua regresaba al mar.

La lluvia limpió árboles, removió la tierra, dio de beber a los animales, las plantas y a la humanidad.

Cada quien aprovechó según su capacidad.

La humanidad estaba entre dos titanes, el bueno y el malo.

El bueno, la advertía de esta maldad, que la llevaría a dar frutos malos y perder el cielo eternamente;

Mientras, el malo se hacía pasar por bueno, confundiendo la dirección, de la libertad de la humanidad.

¿ Cómo  salir de esa confusión tan grande, cuando los dos caminos parecen buenos, pero uno lleva a la perdición ?

¿ Qué tanta responsabilidad hay en una decisión, cuando hay confusión, ignorancia, pero buena voluntad ?

La naturaleza no perdona, cobra su factura.

¿Entonces por dónde empezar?  

¡ Por disipar la ignorancia !

Buena voluntad sin compromiso, es agua estancada que se contamina, se ensucia.

Un hombre exclamó

¡ Pero sí me estoy instruyendo !

Entonces al buscar la verdad, podrás visualizar las consecuencias de tus actos, podrás salir de la ignorancia y tomar mejores decisiones, que repercutirán en tu propia vida.

 Ya visualicé, ya me convencí que es lo mejor

! Pero tengo miedo al compromiso !

Requiere de mi esfuerzo y mi tiempo, me da flojera, por eso me dejo llevar por lo fácil, por lo práctico, según la circunstancia.

¿ y cómo te sientes después de actuar así ?

De pronto muy bien, después de robar el botín  

¿ y después que pasa contigo ?

Lo malo me empieza a parecer bueno, después de disfrutarlo. .

¿ y después que pasa con tus emociones ?

Siempre estoy temeroso, inseguro de ser apresado, siento un delirio de persecución, no encuentro paz.

¿ Has evaluado el valor del botín, contra el valor de la paz ?

Sí, por una parte, regresaría todo el botín para tener paz, pero me llega el temor de que haré sin el botín, lo necesito.

¿ Entonces que necesitas más, el botín o la paz ?

Ambas ¡ ahí está la tentación ! :

Lo sublime contra lo terreno, veo que no se puede servir a dos amos, o la paz, o el botín.

El botín me quita el hambre material, pero me da hambre espiritual.

¿ Sabes cual es tu destino al final de cada camino, al final de tu vida ?

Sí, cada quien es arquitecto de su propio destino.

¿ valdrá la pena un botín que no te servirá en la eternidad ?

¡ NO !   ¿ Entonces ?

Sería muy doloroso para mí, no compartir el amor y el cielo ETERNAMENTE, me dolería mucho verme separado de esto, Por un botín pasajero.

La Fe que se me dio, no la he alimentado con oración y compromiso, por eso estoy débil y no puedo vencer la tentación.

¿ Entonces que necesitas ?

 pues  ¡ Orar y comprometerme con la verdad, que conocí para mi salvación !

¿ y qué vas a hacer ?

Apreciar este camino de salvación, para poder vivir en paz y soportar la pobreza.

Este hombre, aunque llegó a caer en la tentación varias veces, se arrepentía y volvía al camino de la verdad y del conocimiento, disponiéndose con mayor fuerza a no volver a caer en la tentación y esto le traía PAZ, entonces llovió sobre él, un torrente de gracias, que limpiaron su conciencia, formando ríos y lagos en beneficio propio y de su prójimo, que lo hacían vivir como hijo del bien y no del mal, a pesar de los trabajos que pasaba para salir de su pobreza.

Llegando al final de sus días, se fundía en el mar del amor de Dios, que lo abrazaba como hijo predilecto, por haber logrado vivir y morir, en la gracia de Dios…

 

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